Dijo el sabio
que tan solo dura lo fugaz
como un sonido sin canto
o una palabra guardada
o el recuerdo de lo inmóvil…

No hay que abatirse
por las flores ya perdidas
no, no hay que estar triste;
no hay que dormir
sobre el polvo y la ceniza
pues el amor, como la sombra
siempre es inalcanzable:
unas veces te adelanta,
otras huye tras de ti.

No debe haber drama en el murmullo
no, no se puede creer en lo que nace
sin pensar que -ya gastado- ha de morir;
Nosotros fuimos luz
para ser luego agonía
pensamos que el agua era solo de las hojas
que la noche una ventana a la esperanza.

Pero lo único real es este hueco
esta silueta de papel
de tu cuerpo en mi memoria
este murmullo eternamente efímero
de tu voz clavada, de tus ojos
al tiempo que te alejas en mis sueños,
mientras lentamente avanzo
hacia el mundo del olvido..